Reservado con meses de antelación, ya que tenía la sensación de que sería bueno y no decepcionó. Ambiente maravilloso, menú pequeño pero bien pensado, excelentes platos y gran relación calidad-precio, qué más se puede pedir. La tabla de charcutería era de tan alta calidad por el precio, la burrata era hermosa y el vongole tan bueno como se pone. Me encantó!